MITIFICAR ES DE SABIOS

De los jóvenes puretos a los veinteañeros retros, desfile de estilos y mentalidades, de edades y de pensamientos, solo agrupados frente a una hoguera llena de luz inagotable, la fogata que hace mas de cincuenta años alguien prendió y que durante décadas lleva quemando el corazón de cuantos la aman, solo rock and roll, y ya sabes nena, me gusta.
En el recuerdo, aquellos álbumes, vinilos imitando el negro carbón surcado por miles de fantasías, y tantas y tantas leyendas, historias sobre gentuza vividora, que pasaba su vida ganando dinero fácil, acompañados de estupendas tías y completamente sumergidos en las drogas y en el libertinaje… Que mal nos vendieron la historia.
A continuación solo los elegidos, aquellos a los que el azar les concede una y mas oportunidades, nadie sabe y nadie quiere saber porque esos muchachos, que vergüenza para una nación tan disciplinada y educada, que generación mas aberrante…
Cuando yo tenia la edad en la que me debería de haber quedado para siempre, esa de los últimos coletazos del blanco y negro, la de los penúltimos coletazos del uhf, un día y tan solo un día a la semana (creo recordar que los jueves, a eso de las siete de la tarde), teníamos el privilegio de asomarnos de una forma precensurada(imagino) a la ventana de la cocina de la música que se estaba guisando en el resto del planeta, aquel nostálgico con aquel cartel de presentadores de lujo parodiados sin compasión y en cada capitulo por el gran Carlitos Tena. Era fascinante su forma de biografiar a las bandas y a los musicos que presentaba (siempre inventaba las historias), algo parecido a esto:
Papa Thownshend un mediocre saxofonista, nunca habría imaginado que su unión con una tal Betty pudiera dar como fruto a un espantoso y laguiruto niño llorón y proteston, que constantemente estaba hurgando en partituras e instrumentos de la casa. El mamar de los pechos de un pentagrama no siempre tiene como fruto a un músico, pero en este caso parece ser que si.
El pequeño Roger solía dar grandes satisfacciones a sus papaitos con excelentes calificaciones académicas, lastima dijo uno de sus profesores cuando descubrió que el rock and roll se había apoderado del muchacho, y lo encontró aporreando una guitarra de madera que el mismo se había fabricado, mas tarde papa Daltrey le tendria que comprar una en serio y así consiguió que se fuera a dar la tabarra en bodas y algunos clubs junto con sus colegas, que después pasarían a ser THE WHO
De los suburbios de London el destino rescato al mas músico del grupo, the ox, considerado un pionero en técnicas para tocar el bajo y un prodigio como compositor, en 2002 en Las Vegas sufrió un infarto mortal, todo parece indicar que soplo mas de la cuenta la bolsa de la farlopa y con cincuenta y ocho taquitos fue a reunirse con Moon, Hendrix y demás familia ..
Aquí parece que falta algo, alguien que nos deleite con ritmos y sonidos nunca oídos ,la fuerza y la agresividad, la expresión de la contundencia y la crudeza de la vida misma, algo que ruge en los garitos donde la gentuza se reune para ponerse hasta el culo de alcohol y rock… si, Moon el destructor, lastima que después de salvar tantos y tantos obstáculos del vicio y el libertinio una puta medicacion contra el consumo de alcohol se lo llevara a hacer silencio eterno, algo para compensar la potencia del ruido maravilloso que nos lego durante su corta pero productiva vida.
EL CONCIERTO
Estos dos ultimos resucitados en partitura por grandes músicos como John Bundrik (teclista que no tengo ni puta idea de quien es el abuelo) Pino Palladito al bajo, que estuvo genial, Zak Starkey batería, súper contundente y rotundo, un fuera de serie, y Simon hermanito de Pete a la guitarra y coros.

Es maravilloso contemplar a grades y miticos artistas, ahí delante de ti, repasar los acordes de canciones que aunque no han marcado como otras tu vida, si alguna vez ,en alguna ocasión, en algún momento puntual has intentado tocar en la guitarra y por supuesto has tarareado. Dieron una gran gira por su gran carrera, interpretando su mas míticos temas, sencillamente genial, los dos Who supervivientes no defraudaron a un publico multitudinario y consiguieron como no emocionar.
ARENA (o era cal, no se) Para mi gusto estos escenarios son demasiado modernos y los sonidos demasiado perfectos, por cierto y hablando de sonidos, el volumen muy bajito, como si se cortasen para no molestar a los vecinos, repetiría si ellos repitiesen.

ESCRITO Y VIVIDO POR PEDRO LUIS MARTINEZ.