Loquillo en la Ciudad Muerta

En esta ciudad nunca hay conclusión y nunca hay evidencia. Estoy hablando de Ávila, una ciudad normalmente muerta que ayer intentó reanimar Jose María Sanz, alias "Loquillo", ofreciendo uno de los mejores conciertos que han pasado por aqui en los últimos años.

Con un sonido algo peor de lo esperado, Loquillo, acompañado de sus ya habituales Igor Pascual y Jaime Stinus, salía a escena muy puntualmente interpretando el tema con el que suele abrir todos sus conciertos desde el año 2005. Una de las canciones que mejor define su forma de ser, y que no es otra que "Rock and Roll Actitud". 

Pese a que el concierto era gratuito, no sorprendía ver grandes trozos de suelo vacío en la cubierta multiusos. En esta ciudad aprieta las gargantas el aburrimiento, y está rota de cansancio, de historia y de deseos. Los que somos de aquí lo sabemos y no nos extraña que la gente prefiera pagar 25 euros por ver a "Hombres G" que cero euros por ver a una leyenda viva. Tampoco nos sorprende que muchos de los que sí se acercaron al concierto no entendiesen los guiños a grupos como "Dire Straits", o que se preguntasen una y otra vez quienes eran aquellos nombres que en ciertas ocasiones el Loco mencionaba, como Johny Cash o Johny Holiday (y serían algunos más si tambien hubiesemos podido cantar a la memoria de Joe Strummer, pero parece ser que esa canción ya la han eliminado del repertorio...). Ávila es así. De echo, es de las pocas ciudades en donde no me suelo poner en primera fila, pues aqui no se entiende que la gente baile en los conciertos, y te arriesgas a tener que dar cuatro voces a esa persona a la que tu baile pueda molestar... Tampoco entiendo como despues del concierto mucha gente decía que había faltado espectáculo, pues precisamente los conciertos de Loquillo pueden carecer de algunas cosas, pero lo que seguro encuentras es puro espectáculo. Solo ver a Igor con su guitarra ya es un show, y el personaje que interpreta Loquillo cada noche desde hace 30 años es algo que muchos de los mejores actores de este país no sabrían hacer. Pero dejemos de hablar de esta ciudad de grito y decepción, de pena y de miedo, y vayamos a lo nuestro, a hablar de música, y a intentar desgranar cada momento de la noche de ayer en Ávila.

Había visto a Loquillo hacía un par de meses, teloneando a "Deep Purple" en Hoyos del Espino. Aquella crónica nunca salió a la luz porque no tenía internet, pero después del concierto de ayer creo que ya no hace falta volver atras en el tiempo. Si en aquel concierto el disco "La nave de los locos" era el protagonista, en Ávila era el turno de "A por ellos, que son pocos y cobardes". Hacía 28 años que Loquillo no venía a la capital, y creo que por eso eligió un repertorio cargado de clásicos para compensar a todos aquellos que aún no habían tenido ocasión de verle.

Si sonaron temas más nuevos como "Linea Clara", "Memorias de Jóvenes Airados", "Contento" o "La nave de los locos", pero dió muchísima más importancia a clásicos como "Pégate a mí", "El rompeolas", "Feo Fuerte y Formal", "El ritmo del garaje" o "Rock Suave", en la que volvió a aparecer sobre el escenario el ya típico taburete de bar que suele acabar junto a la batería de Laurent Castagnet.

Además de estas, se pudieron escuchar una versión nueva de "El hombre de negro", "Cruzando el paraíso", o "El hijo de nadie".

La ciudad parecía despertar poco a poco de su letargo, y Loquillo continuaba animando a la gente con temas como "Carne para Linda", en la que se bajó a cantar con el público, "La mataré", "Rock and Roll Star", y "Cadillac Solitario", canción con la que ponía punto y final a un concierto de una calidad que dudo mucho se vuelva a repetir en esta ciudad muerta.

Pero antes de despedirse de Ávila, Loquillo había querido darnos otra gran sorpresa, para mí la mejor de la noche, pues era un tema que aún no había visto en directo, y no son precisamente pocas las veces que he visto a Loquillo, tanto en solitario como con los ya extinguidos Trogloditas. Se trataba de la versión de "Mujer fatal", primera canción que cantó Loquillo según confeso anoche ante el público abulense, y que sirvió una vez más para recordar a otra leyenda como él, es decir, a Pepe Risi.

Para terminar, os dejo con un video del inicio del concierto de ayer, cortesía de Avilared, y ya que ponemos su video, no les diremos que a ver si para otra vez se documentan un poco antes de escribir sus artículos, así como tampoco les vamos a decir que "El rompeolas" no se llama "No hables de futuro", ni que "El hombre de negro" no se llama "Voy de negro".

Como punto negativo, solo una cosa. Nos faltó "Cuando fuimos los mejores", y una que hubiese definido muy bien esta crónica y que sí escuchamos en "Musicos en la Naturaleza", "Political Incorrectness"...

Nos vemos pronto.
Un saludo!